El proyecto se basa en las preexistencias, en los elementos y estrategias ya existentes para la creación y reinterpretación de unos nuevos modelos. Se plantea una intervención lineal, sobre un camino preexistente, estableciendo una dualidad entre el camino exterior (superior) y el camino interior (subterráneo). Ambos recorridos se conectan mediante núcleos de comunicación con escaleras, lucernarios y ascensores. Estas «chimeneas de luz», junto con otras exentas, crean un ritmo y dinamismo en el recorrido superior (hitos de masa) y funcionan de lucernarios a la parte subterránea creando espacios de estar y marcando ritmo inferior (luz). A su vez, el recorrido abre en diferentes puntos. Se quiebra, y es en estos quiebros en los que aparece el paisaje, fragmentado y emergente.
El final del recorrido lo cierra el Spa, «dos ojos al paisaje». Dos elementos que emergen de la tierra para mirar a las láminas de agua existentes. «Mirar el agua desde el agua, aquí y allí, dentro y fuera». Frente a la humedad, frío y niebla exterior, el vaho, calor y vapores en el interior. En ambos lugares, el paisaje aparece como refugio.
El camino independiente desde el aparcamiento hasta el restaurante, junto al jardín renacentista existente, está marcado por naranjos; el olor y la vista como antecesores del gusto. También puede accederse a través de un patio de acceso a la Quinta, generando un sistema de patios marcados por el hilo de agua que nace desde la cisterna-manantial trasero.
La tectónica, la materialidad, se expresan mediante hormigón y madera. La elección de estos materiales está sujeta a su cambio, a su deterioro, al paso del tiempo, que se ve reflejado en ellos. La expresividad adquiere un carácter tridimensional. Se trata de crear el futuro y de evocar el pasado. Ruinas en la naturaleza.
Título: Pousada Ribafria
Autor: Alejandro Bocanegra
Fecha: Abril 2013
Lugar: Sintra
Programa: Parador, Balnearios, Spa, Capilla, Restaurante