Entre las claves que el mundo natural ha perfeccionado existen dosque sirven para valorar su verdadero poder intrínseco y explorarla capacidad de relación de este contexto con el resto de la realidad. Por un lado, el poder de la disgregación seminal vegetal en sus diferentes formas, ya sea a través desemillas voladoras, navegantes, rodantes, explosivas, adherentes o comestibles, ejemplifica esa capacidad multifacética, ilimitada y exponencial de afección e interrelación. Por otro lado, y combinado con el mecanismo anterior, la versatilidad en lo que a adopción de mecanismos de protección funcionales y a medida se refiere, a través decáscaras, cortezas opieles, sirve para impedir que esa diseminación seainfructuosa.
La ausencia de protección dejaría indefenso el contenido y el exceso de la misma limitaría su dispersión, es el cuidado equilibrio entre esas dos características el que da pie a una disgregación eficaz e ilimitada de la carga genéticacontenida en cada semilla, y por tanto a la riqueza natural que conocemos. Explorar el potencial de ese delicado equilibrio y tratar de conseguirlo para el archivo de obras de Wirkkala y Bryk es el objetivo principal dela presente propuesta.
Concepto
El sistema planteado se basa por tanto en la definición de unas piezas que, como en el caso de las semillas, simultáneamente protegen y confinan el variado material disponible sin limitar una diseminación eficaz y sugerente del mismo. Se configuran con la voluntad de ser, en sí mismas y como conjunto, capaces de generar un fácil acceso a su contenido, propiciando un intercambio fluido y atractivo entre esta colección de obras y la sociedad.
Las piezas definidas, ideadas para organizar de manera flexible y abierta la información, disponen de una dura envolvente que en estado cerrado protege la totalidad de su contenido. Al igual que ocurre con los frutos de cáscara, en los que una delgada fisura en su protección permite a la semilla abrirse paso para florecer, o que de manera externa pueda accederse al deseado interior, los diseños planteados cuentan con un sistema de apertura por el que un sencillo gesto es capaz abrir y revelar un valioso mundo interior. Es el propio contenedor, gracias a un aprovechamiento máximo de su envés, el que sirve al desplegarse no solo como expositor del contenido sino como relato y territorio de aproximación y conocimiento de las obras y sus autores. Es al mismo tiempo la naturaleza portátil de cada una de estos contenedores la que permite imaginar el archivo no como algo estático, sino como una entidad viva, capaz de desperdigarse y volver a reagruparse con facilidad.
Sistema de generación
La definición de la formalización exterior de estos tótems versátiles nace del encuentro natural de dos formas básicas, de la conciliación en definitiva de una dualidad latente. A través de la unión de dos polígonos con unas propiedades formales y geométricas muy claras: el cuadrado y el hexágono, se obtiene una nueva figura más rica y versátil que las anteriores por separado, capaz de asumir importantes propiedades de ambas.
Capacidad de agrupación cerrada
La forma resultante posibilita ante todo una agrupación de piezas lo más optimizada posible, en colmena o puzzle, en la que sin embargo se adivina un dinamismo intrínseco. Este punto de partida, sin embargo, más próximo a la configuración de un archivo tradicional, no limita una posible organización más libre y flexible del mismo. Como si de un juego de Tangram se tratase, las piezas, una vez desligadas del conjunto, pueden organizarse de manera independiente -estableciendo entre ellas sencillas reglas geométricas de relación-,disponerse generando grupos cerrados -de naturaleza más regular o más libre según las necesidades-,o finalmente organizar secuencias encadenadas más espontáneas. La configuración de estas piezas y su utilización agrupada da pie a imaginar estas unidades mayores como grandes biombos o paredes móviles capaces de organizar funcionalmente un espacio o cualificarlo al actuar de fondo.
Materialidad
La materialización de estas piezas, atendiendo a su condición de cofres, se lleva a cabo completamente en madera, optando por una solución rugosa y oscura al exterior en contraposición a un interior de naturaleza más luminosa, limpia y continua,sin juntas.Dentro, una secuencia de baldas, vitrinas y soportes metálicos acogen la variedad de objetos del archivo, mientras que la parte inferior,reservada para cajoneras de distintos formatos, puede alojar documentos, piezas más pequeñas u objetos delicados de manera protegida. Junto a estos elementos, acompañando a las guías de las baldas, se propone la instalación estratégica de unas sutiles fendas de luz indirecta. Los dos revestimientos anteriores se montan con una mínima separación que posibilita la inserción de cableado, guías, anclajes o pequeños interruptores que permiten hacer más funcional cada pieza. Un doble fondo en la parte más baja sirve para alojar otro tipo de equipamiento como baterías, transformadores o cableado auxiliar, necesario para dotar de mayor independencia a cada unidad.
Realidad digital
La relación de este sistema con el ámbito digital se plantea como conexión con una realidad paralela y ampliada. Simultáneamente a la elección del contenido y la elaboración del discurso de cada uno de los contenedores, se propone la necesidad de realizar una traslación equivalente a un catálogo digital. Cada una de los contenedores debería contar con un código exterior escaneable, accesible desde cualquier dispositivo con conexión a internet, que permitiera disponer de manera autónoma y externa de esa información ampliada y comentada. Esto haría posible,tanto a la administración del archivo como a investigadores, conocer el contenido de cada pieza sin necesidad de abrirla. Al mismo tiempo posibilitaría a los visitantes de la exposición propuesta ampliar la información visible, y a quienes no pudieran visitarla físicamente hacerlo virtualmente desde cualquier navegador.