La Plaza Circular es en la actualidad el resultado de la superposición de un trazado perfectamente geométrico (un círculo de 130 metros de diámetro) sobre una zona que ha sufrido numerosas transformaciones a lo largo del tiempo. Su forma destaca por su regularidad sobre un tejido de calles aparentemente irregulares pero que, estudiadas detenidamente, resultan ser el resultado de diversas actuaciones urbanísticas llevadas a cabo en Valladolid en momentos distintos.
La propuesta pretende dotar de uso al espacio central en su totalidad. Utilizar la plaza además de cómo zona de paso como lugar de encuentro y estancia. Dotar a la plaza de un mayor carácter peatonal. Equilibrar el uso peatonal y rodado en la plaza ya que actualmente está enfocada hacia el automóvil condicionando negativamente el espacio verde central.
Cambios
Eliminar barreras en el centro de la plaza: Zona de césped y pavimento al mismo nivel y continuo de forma que el espacio verde pueda ser utilizado.
Para mejorar la accesibilidad a la plaza se plantean nuevos pasos de peatón en lugares que no produzcan gran cambio en la circulación rodada e influyan de forma negativa sobre el resto del viario urbano.
Creación de nuevos pasos o “caminos” dentro del espacio central que permitan la posibilidad de cruzar la plaza de forma recta y no rodeando todo el espacio.
Diseño unificado del mobiliario: Bancos, kioscos, papeleras, iluminaria en general, prensa…
Reordenación del mobiliario urbano ya que en muchos casos perjudica el paso y estancia peatonal.
Nuevo emplazamiento de la entrada y salida a parking subterráneo: Presenta un grave problema para la circulación y genera espacios residuales dentro del espacio central. Se trata de establecer esta entrada y salida en un carril excéntrico (igual que parada de taxis o autobuses) estableciendo un orden circulatorio análogo a una rotonda (incorporación y desvió de vehículos desde la derecha).
Eliminación de los aparcamientos para vehículos privados dentro del espacio circular llevando este uso a las calles que desembocan a la plaza.
Unificar elementos de mobiliario. Reducir al máximo el número de elementos y crear nuevos diseños con varias funciones. Ejemplo entrada a parking con zona de bancos.
Unificar dentro de lo posible la línea de calle. Las aceras se ensanchan y estrechan dentro del espacio circular, intentar evitar estos cambios es una tarea complicada aunque es posible al eliminar alguno de los usos actuales.
Consecuencias
Cambios en la movilidad peatonal: Nuevas relaciones dentro del espacio urbano. De ser una zona de paso a ser una zona de estancia se convierte en un punto de atracción dentro del espacio público – urbano: “La calle como espacio de todos, punto de reunión social”.
Mejora de la actividad comercial: Nueva relación de los establecimientos al encontrarse las aceras más liberadas de mobiliario (nueva ordenación). Influye la ordenación de la zona central permitiendo recorridos más cortos a través de la plaza, así como la posibilidad de introducir algún elemento dentro de ese espacio.
Optimización del espacio central:
Como zona de paso estableciendo nuevas conexiones y recorridos dentro de la plaza.
Como espacio de descanso, lúdico-recreativo, etc… mayor acogida de personas y diversidad en los usos del espacio.
Título: Circular. Un espacio en la ciudad
Autores: Alejandro Bocanegra + Javier Chávez + Lucía Galonce
Lugar: Plaza Circular. Valladolid
Cliente: Universidad de Valladolid